EL CURIOSO IMPERTINENTE
El curioso impertinente es una
novela corta que Cervantes intercala en el primer tomo de Don Quijote y que
Pero Pérez, el cura de la aldea, lee en voz alta para sí y para los que en la
venta de Palomeque están.
En Florencia, Anselmo casado con
Camila decide poner a prueba la virtud y fidelidad de su esposa y para ello quiere
contar con Lotario, su amigo leal e inseparable. Éste intenta disuadirle de
tamaña majadería, pero sus múltiples razones no son atendidas por Anselmo que
insiste en que la prueba se lleve a efecto dándoles todas las facilidades para
que Camila se rinda a los requerimientos de su amigo Lotario...
Terminada de leerla, opina el
cura:
“Bien me
parece esta novela, pero no me puedo persuadir que esto sea verdad y, si esto
es fingido, fingió mal el autor, porque no se puede imaginar que haya marido
tan necio que quiera hacer tan costosa experiencia como Anselmo. Si este caso
se pusiera entre un galán y una dama, pudiérase llevar, pero, entre marido y
mujer algo tiene de imposible; y en lo que toca al modo de contarle, no me
descontenta.”
Es una novela que según el
bachiller Carrasco comentará en el segundo tomo del Quijote, ha sido criticada,
no porque fuera mala sino por estar fuera de lugar y que nada tiene que ver con
las andanzas del caballero andante.
Y Cervantes, en la pluma de Cide
Hamete Benengeli, defiende estas obras incluidas en la principal, asegurando
que eran dignas de haberse imprimido por su propio valor de manera independiente.